Por Juan José Antuna Ortiz
Película del año 2013 (el que para mí ha sido el año más prolifero en lo que va de la década) que reúne a un elenco más que espectacular y grande comandado por el que quizá sea el director de cine que más ha crecido en lo que va de la década en la meca de Hollywood, David O. Russel; el cual tiene un potencial más que enorme cuando se trata de sacar lo mejor de cada actor que trabaja con él.
La película nos cuenta la historia de Irving, un estafador y su inteligente compañera Sydney, interpretados por el respetadísimo Christian Bale y la hermosísima e igualmente talentosa Amy Adams. Aunque de bajo perfil, estos estafadores han logrado hacer mucho dinero engañando a gente común, pero de dinero, quitándoles sus ahorros prometiéndoles una promoción en un banco inglés, pero su juego se les cae cuando un agente del FBI los atrapa. Para salir del enrollo y librar la cárcel estos tienen que ayudar al agente DiMaso (interpretado por el que parece ser el ahora hijo consentido de Hollywood, Bradley Cooper; al postularlo por tres años seguidos como uno de los cinco mejores actores por sus actuaciones) para atrapar a otros estafadores, quien después atrapado por su avaricia decide ir por policías y políticos que acepten sobornos y así él poder avanzar en su conquista para puestos más grandes en la agencia. Ahí empiezan a conocer a gente más poderosa y la codicia del agente por querer cortar más cabezas y por lo contrario la negación de Irving por saber que cada vez será más difícil salirse del enrollo en el que se han metido, además de temer perder al único amor de su vida, Sydney (la cual se hace llamar Edith y finge ser inglesa) por el constante coqueteo entre ella y DiMaso, los llevará a realmente crear un casi impecable truco de magia para salir librados de esa, y poder rescatar a las personas buenas que involucraron en el camino, pues Irving, a pesar de ser un estafador, el cual sólo estafa a gente que tiene dinero, es una buena persona con escrúpulos y enfermo que sólo quiere cuidar a su hijo.
Como ya se los había comentado al principio, si algo es digno de rescatar de esta película, sin duda alguna son las actuaciones de prácticamente de todo el reparto, empezando por Bale que además de haber ganado varios kilos de peso para interpretar a la perfección su papel, realmente se mete a la piel de su personaje (como ya lo habíamos visto encarnarse en cuerpo y alma en los papeles que le confía O. Russel como lo hizo en El Peleador, papel que le valió su primer Oscar a mejor actuación secundaria) Amy Adams también ya nos tiene acostumbrados a un nivel actoral que sin duda la llevará a ser una de las mejores actrices de todos los tiempos. Bradley Cooper y la preciosísima y encantadora Jennifer Lawrence (quien interpreta a la esposa de Irving, Rosalyn la cual lo tiene manipulado que si la deja se llevará a su hijo y lo hace ver su suerte con su genio tan volátil y difícil de controlar –que para mí es su mejor interpretación, incluso por encima de Los Juegos del Destino que también, al igual que Bale le vale su primer Oscar a actuación femenina protagónica de la mano del mismo O. Russell-) junto con Jeremy Renner y la actuación especial y quizá una de sus mejores apariciones en corto del monstruo Robert De Niro (La cual le valió un reconocimiento del Sindicato de Actores para la sorpresa de muchos, o quizá no para sorpresa de muchos pues estamos hablando del que quizá sea el mejor actor más versátil vivo de todos los tiempos) cierran este elenco estelar junto con todos los que están a su alrededor.
Una película que tiene mucho del sello Scorsese desde el ojo de su servidor, pues tiene mucho de ese estilo setentero (década en la que brilló de sobremanera este maravillosos director y que sin duda es referente de muchos como O. Russell, como la película Raging Bull) además de estar mucho del tiempo de la película narrada por sus actores. (Sello Scorsese)
La trama se digiere fácil y fluye continua sin traba alguna, no se complica nada para que el espectador la disfrute, la música impecable, el vestuario de la época y todo lo que ello representaba la hicieron una película multinominada, ganadora y la que para mí ha sido una de las mejores películas en los últimos dos años. American Hustle brilla con luz propia y atrapa desde el primer momento, para no soltarte hasta que los estafadores logren lo que quieren lograr.
Las opiniones vertidas en este artículo corresponden exclusivamente a su autor y no necesariamente corresponden con las de la administración de En 10 Puntos