Hoy nos vamos hasta Francia, para …. Bueno no tengo idea
Bienvenidos a Fuera de Hollywood, porque no solo de Blockbusters vive el hombre!
Uff, hace un montón que no hacía uno de estos! Pero vi hace poco la película francesa “Holy Motors” y me motivó a volver a esta sección.
Porque simplemente es lo mas "fuera de Hollywood” que he visto en años!
Resulta que el excéntrico director Leos Carax no había dirigido un largometraje en 13 años, y después de este largo período de abstinencia, vuelve a los ruedos escribiendo y dirigiendo esta peculiar película, en que un actor pasa los días recorriendo Paris en limosina, acompañado por una taciturna conductora, mientras completa encargos de un misterioso jefe. Los encargos: vestirse de diferentes personajes y salir a interpretar escenas. Así como lo oyen.
Entonces vemos al actor, Monsieur Oscar, interpretado épicamente por Denis Lavant, como una anciana indigente, como un padre regañando a su hija, como un asesino ruso e incluso como una especie de gnomo deforme que disfruta comiendo flores y secuestrando supermodelos.
Ninguna de estas viñetas tiene un sentido completo ella misma, ninguna se relaciona con la anterior y se puede argumentar que entre todas no le dan significado alguno a la obra. “Holy Motors” es una película Fuera de Hollywood no solo porque es francesa, es fuera de Hollywood porque va totalmente en otra dirección al cine narrativo que estamos acostumbrados a ver. Es mas, no es cine narrativo del todo! No nos está contando nada.
Entonces, si no está contando una historia, qué está haciendo?
Así como en la literatura hay novelas y cuentos, que son literatura narrativa, también hay poesía y ensayos. En la pintura hay retratos y paisajes, también hay arte abstracto.
Igual pasa en el cine, así es “Holy Motors”, no es la primera ni será la última película que no tienen una historia definida, y son mas bien como una poesía, un collage visual en donde las ideas y los sentimientos son lo importante, no la historia.
Así, aunque no tengamos contexto, aunque no tengamos personajes a los que seguir o historia en que interesarnos, Leos Carax consigue movernos emocionalmente, cada fragmento nos llega de alguna forma y en conjunto podemos sentir la nostalgia, el cansancio, la maravilla durante toda la película. La empatía con lo que vemos en pantalla existe, a pesar de lo misterioso y abstracto de la obra.
Pero entonces, la peli se trata de algo? La verdad, parecido a lo que pasa con las películas de David Lynch, siento que esforzarce en darles significado es limitarlas, atraparlas y francamente, malentender su objeto final, que es transgredir, retarnos como espectadores, avivar la polémica, ser muchas cosas para diferentes personas. Pero si me preguntan, “Holy Motors” es sobre el cine, no sobre como se hace el cine, sino sobre la magia del cine, ese mundo fantástico en que una persona llega, se convierte en otra por un instante y luego se va a hacerlo nuevamente decenas de veces, y en ese momento, puede cambiar, emocionar a los que observamos, un mundo en que hay fuerzas oculta que no podemos ver pero que manejan este proceso creativo, en que incluso un personaje de una película puede venir y aparecer en otra, como una travesura de los creadores.
“Holy Motors” es a mi gusto eso mismo, una travesura de Leos Carax, a través de la cual nos lleva por ese mundo mágico, cruel, fantástico y sin sentido que son las películas.
Y en medio de todo eso, sin que nadie lo espere...
Ya lo saben, si se sienten valientes y quieren ver algo fuera de Hollywood, no tienen que buscar mas allá de “Holy Motors”!
Y eso es todo por hoy, pero pronto volveremos a hecharle un vistazo al cine Fuera de Hollywood.